Estuvo casi 12 años preso con otra identidad y lo descubrieron tras su asesinato: investigan cómo sucedió

A partir de una investigación que desarrolló MDZ, autoridades judiciales y policiales tomaron conocimiento que el exconvicto asesinado la madrugada del lunes por sus dos hijastros, en Las Heras, utilizó una identidad falsa durante más de una década en la que vivió en Mendoza. 

Se trata de Francisco David Lescano Aguirre, de 35 años y nacido en San Miguel de Tucumán, capital de la provincia conocida como el Jardín de la República. El ex reo se hacía pasar por un hombre llamado Osvaldo Joaquín Soto, de 40 años, oriundo de Jujuy, y logró engañar a la Policía de Mendoza, el Ministerio Público Fiscal, el Poder Judicial de Mendoza, el Servicio Penitenciario de la provincia y hasta la Justicia Federal. 

La situación generó controversia y llegó hasta la Procuración General, por lo que se ordenó realizar una serie de averiguaciones para establecer cómo Lescano atravesó todos los filtros y logró "adueñarse" de la identidad de Soto. Asimismo, desde la Inspección General de Seguridad (IGS) se inició una investigación interna que apunta hacia el Servicio Penitenciario y busca establecer que tipo de documentación fue la que presentó el exinterno a las autoridades. 

En todos los organismos mencionados, Lescano se encontraba identificado con el nombre, apellido y DNI de Soto. Con esos datos fue investigado en seis expedientes judiciales, recibiendo un total de cuatro condenas por homicidio simple, robo agravado por el uso de arma impropia, comercialización de estupefacientes (Ley 23.737) y amenazas simples en contexto de violencia de género. 

Por esos cuatro delitos en los que fue sentenciado, terminó cumpliendo tras las rejas una pena unificada de 11 años y 8 meses en prisión. A lo largo de todo ese tiempo, nadie advirtió que estaba utilizando una identidad falsa. Pero todo salió a luz horas después de que Lescano fue ultimado de once puñaladas por los dos hijos de su última pareja, con quien hace poco tiempo tuvo un bebé. 

Fue a través de las consultas que realizó este diario sobre las diferencias que presentaban la foto del DNI que figuraba del fallecido en el Renaper -bajo el nombre falso que utilizaba- y la fotografía que se le tomó para el prontuario del Servicio Penitenciario, que las autoridades comenzaron a advertir la irregularidad. 

En medio de las averiguaciones, MDZ logró contactar a la familia del hombre asesinado y una hermana confirmó que su nombre era Francisco David Lescano y que el nombre con el que se encontraba identificado en la provincia era erróneo. Incluso, los familiares del exconvicto temían que esa situación les trajera problemas a la hora de solicitar la entrega del cadáver, por lo que viajaron a Mendoza para resolver el inconveniente. 

Durante la tarde noche del lunes, las autoridades judiciales y policiales a cargo de la investigación por el homicidio de Lescano trabajaron a contrarreloj para poder confirmar de manera física que el hombre empleaba una identidad falsa. Así, en una de las primeras ordenadas por el fiscal de Menores Gustavo Farmache, se cotejaron las huellas de Lescano con las que le figuraban a Soto en el Renaper y así descartaron que esa sea su identidad real. 

Ahora, sólo resta establecer de manera oficial que la identidad del hombre fallecido haya sido Francisco David Lescano, tal como lo aseguraron sus familiares. 

El crimen en Las Heras

La reconstrucción que realizaron los detectives del caso señala que todo comenzó pasada la 1.20 con una pelea entre Lescano y los dos adolescentes dentro de la vivienda que compartían, ubicada sobre calle Roosevelt del barrio Los Tamarindos II. 

Luego, la pelea se trasladó hacia el exterior del inmueble, donde los dos confesos autores atacaron a la pareja de su madre con un cuchillo, asestándole once puñaladas en el cuello, la región doral y el abdomen, surge de las testimoniales. 

En estado crítico, la víctima fue trasladada en una moto hasta el Hospital Carrillo, donde los médicos necesitaron ayuda policial para asistirlo, ya que se encontraba extremadamente alterado.

Una vez que verificaron las lesiones que había sufrido, lo derivaron al Hospital Central para recibir la atención correspondiente. Más allá de los esfuerzos de los profesionales de la salud, dejó de existir cerca de las 4, a raíz de un shock hipovolémico por la cantidad de sangre que perdió a raíz del salvaje ataque.

Por su parte, cerca del mediodía, los dos adolescentes fueron entregados por su padre biológico en una dependencia policial del departamento y confesaron haber asesinado a su padrastro para defender a su madre, ya que sufría constantes episodios de violencia de género. No obstante, esa versión está siendo investigada por los pesquisas de la causa.